Productividad: cómo evitar procrastinar y ser más productivo

¿Sabes cómo evitar procrastinar? Para muchos, la procrastinación es un mal moderno que nos hace cuestionarnos porqué hacemos lo que hacemos. Sin embargo, no es una enfermedad, sino más bien un estado de ánimo que nos hace aplazar nuestras tareas para después. Aunque sea difícil existen técnicas para evitar procrastinar y ser más productivo.

Actualmente, los trabajadores suelen combatir en contra de la procrastinación para ser más productivos. Incluso, personas que se dedican a actividades específicas diariamente, en especial labores creativas, deben aprender a lidiar con esto.

En cambio, la productividad, en contraposición, es el estado ideal para lograr grandes proyectos, por lo que debe haber un balance entre ambos estados emocionales.  Así, es importante conocer los conceptos básicos para poder tener las estrategias correctas para evitar procrastinar.

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¿Qué es procrastinar?

Aunque es un problema moderno, este concepto tiene un origen antiguo. Del latín, procrastināre, significa “postergar o aplazar hasta mañana”. Es decir, que las actividades que puedes resolver y realizar en el presente, las dejas para un futuro algo incierto. Pero, ¿por qué pasa esto?

Es un hecho que no es una cuestión de pereza o flojera por parte de las personas. En muchos casos, para saber cómo evitar procrastinar, se deben tomar en cuenta otros factores. Ansiedad, miedo, incertidumbre, depresión, entre otras, son algunas de las emociones contra las que se debe batallar.

Ante estas emociones, lo que la mente dice es que, para evitar sentirnos peor, podemos dejar para después nuestras actividades. Y aquí es donde entra el círculo vicioso de la procrastinación: en realidad, aplazar las cosas te puede hacer sentir peor que si las hicieras inmediatamente. Esto tiene una explicación.

Para mejorar nuestro estado de ánimo a corto plazo, dejamos de hacer las actividades urgentes por otras que no son tan importantes. De esta forma, jugamos en contra de nuestra satisfacción a largo plazo. Acto seguido, empiezan a aparecer sentimientos de culpa. Pero en el momento, aplazar lo importante, no nos parece que estas emociones sean tan inmediatas.

Como dijimos, aplazar las cosas no es un síntoma de pereza o dejadez. A veces, subyacen motivaciones de las que como seres humanos no nos damos cuenta. Por ejemplo, baja autoestima, miedo a no ser suficiente o a no hacerlo bien.

¿Te suena que en lugar de hacer tu ensayo final para una materia esencial en tu carrera prefieres ver una película? Pues esta es una actitud usual que puede enmendarse. Con todo esto, ¿podemos aprender a cómo evitar procrastinar y ser más productivo?

Procrastinación y productividad: dos caras de una misma moneda

Como hemos dicho anteriormente, procrastinar es más un estado de ánimo que una enfermedad. Por ello, ser productivo y evitar aplazar nuestras tareas es posible si se tienen las herramientas adecuadas.

Por ejemplo, ser productivo también se relaciona con nuestras emociones. Aunque es fundamental saber administrar y organizar nuestro tiempo, ser productivo suele ser una cuestión de actitud, además de que influyen situaciones externas. Si te sientes desmotivado, triste o estresado, tus niveles de creatividad y trabajo pueden decaer.

Entonces, procrastinar y ser productivo se desprende del estado emocional y de la motivación. Claramente, para mantener un equilibrio entre las dos cosas, es esencial tomar en cuenta algunos elementos. Por ejemplo poder descansar cada cierto tiempo, re-enfocarnos en lo que lograremos en el futuro.

Algo importante para saber cómo evitar procrastinar y ser productivo es implementar hábitos saludables. Estos deben estar conectados con tus motivaciones, con tus metas y sueños por lograr. También, dependen mucho del tipo de actividades que realices. En espacios creativos o artísticos, el orden físico y mental es esencial.

Cómo evitar procrastinar: 4 tips infalibles

Para saber cómo evitar procrastinar, tenemos 10 tips increíbles que te ayudarán a mejorar tu productividad y enfoque en cualquier cosa que hagas. La efectividad de estas estrategias puede depender de diversas causas, así que algunas serán más o menos eficientes. Pero, ¡no te preocupes! Aplica las que te funcionen y aprovéchalas al máximo:

1. Mantén en orden tu espacio de trabajo

Ya sea tu escritorio en casa o en la oficina, tener todo en su lugar ayuda a mantener mayor claridad mental. De esta manera, no se pierde tiempo buscando lápices, papeles o libros que, desde el principio, pueden tener un lugar específico. Además, limpiar tu espacio regularmente también mejora la motivación y el estado de ánimo.

2. Planifica tus actividades 

Un tip infalible para mejorar la productividad es planificar las actividades con antelación, al menos un día antes. Así, no tendrás desorganizadas tus labores y sabrás con exactitud qué debes hacer. Para esto, puedes llevar una agenda manual o digital. En este caso, existen muchas aplicaciones para tener todas tus tareas en orden y fechadas.

3. Identifica las distracciones

Quizá una de las cosas más difíciles para saber cómo evitar procrastinar es reconocer las distracciones personales. Esto puede ser tan pequeño como pasar horas en las redes sociales o empezar a ver una película cuando deberías estar haciendo la tarea. Aprender a identificarlas es un paso más para frenar estos impulsos y concentrarse en lo que es importante.

4. Establece horarios de trabajo

Tener un horario de trabajo delimitado es otra de las cosas más difíciles para mantener la productividad y no procrastinar. Establecerlo ayuda a tener un horario puntual por fuera del trabajo. Comidas, tiempo de ocio, salidas familiares, visitas al médico, entre otras cosas, puede ayudar para mantener el enfoque de las tareas diarias.

Enfoque y organización: cómo evitar procrastinar

Otros consejos que pueden ayudar para no procrastinar son:

1. Empieza por la tarea más difícil

Parte de la procrastinación es que hay tareas difíciles que no quieres realizar. ¿Cómo terminamos con ella? Empezando por ella. Este es un método infalible en el que reconoces que, en realidad, lo que tenías que hacer no era tan complicado. Igualmente, el nivel de satisfacción por lograrlo motiva a cumplir con el resto de las actividades pendientes.

2. Divide las tareas en grandes y pequeñas

Esto se relaciona con el tip anterior y con planificar las actividades. Aprender a dividir las tareas grandes de las pequeñas le da una nueva dimensión a lo que hay que hacer. Así, se es consciente del tiempo necesario para llevar a cabo cada una de las tareas, sean grandes o pequeñas.

3. Pon a prueba tu enfoque

Una buena forma de saber cómo evitar procrastinar es enfocarse en una tarea y cumplirla hasta el final. Esto permite no distraerse y conseguir mejores resultados luego de cada actividad.

4. Ten tu propia rutina de productividad

Hay miles de rutinas de productividad en el mundo, pero se debe tener claro que no todas, necesariamente, funcionan. Prepara tu propia rutina de productividad y verás cómo evitar procrastinar se hace algo común en tu vida diaria.

5. Confía en tus habilidades

Un factor común en la procrastinación es la baja autoestima o el miedo a no hacer las cosas bien. Por ello, confiar en las habilidades académicas, laborales y personales debe ser algo en lo que se debe trabajar a nivel interno.

6. Descansar

Si se trabaja delante de un ordenador cinco días a la semana, es importante tomar un descanso reparador. Sumado a esto, haz estiramientos regularmente para evitar el entumecimiento del cuerpo.

¿Cómo mejorar la productividad diaria?

Ahora que tenemos 10 consejos infalibles para saber cómo evitar procrastinar, es el turno de 6 maravillosos tips para incrementar la productividad diaria. Veamos a continuación cuáles son:

1. Realiza una tarea a la vez

Realizar una tarea a la vez no solo te permite enfocarte, sino que evita abrumarte con más de lo que puedes abarcar. Enfócate en cada una de tus actividades y verás cómo puedes llevarlas a cabo perfectamente.

2. Haz alguna actividad recreativa en tus tiempos de ocio

Bien sea leer, pintar, hacer deporte o practicar cualquier hobbie. Tener espacios creativos personales puede aumentar la productividad. El ocio ayuda a que la mente se libere del estrés, de las tensiones y de las preocupaciones diarias. Algo que te puede ayudar en ello es el mindfullness.

3. Obtén una recompensa

Después de trabajar muy duro durante algún tiempo, es bueno recompensarse con algo que se desee. Esto no tiene porqué ser algún objeto o algo material, al contrario, puede ser salir con amigos o un viaje con la familia. Recuerda que la productividad se relaciona con la motivación y si toda tu motivación es el trabajo, poco a poco dejarás de ser productivo.

4. Come saludablemente

Mantener una alimentación balanceada debe ser un punto fundamental dentro de cualquier estilo de vida. El consumo de vegetales, verduras, frutas y alimentos altos en proteínas alimenta tanto el cerebro como el cuerpo. Y una mente y cuerpo sano, sin duda es un aspecto importante para la productividad.

5. Haz ejercicio con regularidad

Junto a una alimentación balanceada, el ejercicio es otro factor a tener en consideración para la productividad. Además de beneficiar a la salud,  permite estar más activo y alerta ante lo que acontece diariamente. Hay una gran cantidad de beneficios por hacer deporte y ayuda a prevenir enfermedades.

6. Duerme

Por último, tanto para evitar procrastinar cómo para ser más productivo, dormir es un punto fundamental para la vida. Al dormir, se regeneran las células cerebrales, se elimina el cansancio y permite regular los ciclos de sueño de manera natural.